
Se tardó mucho tiempo en conseguir un local propio. Mientras se utilizaba un pequeño local para las diversas actividades, y para las fiestas se utilizaba la terraza del bar Casablanca. Allí se celebró por primera vez, la exposición sobre barcos en miniatura.
Para construir el edificio se hicieron unos bonos en Caixa Vigo de 25 socios del Club de Mar por cinco meses y así se consiguió hacer el edificio en el muelle de pasajeros.
Una vez conseguido el edificio, se pudo empezar a funcionar. Se consiguieron 28 dornas y una yola, y se practicaba natación en las bateas, donde se colocaban las corchadas. Tuvo tanto éxito que la Federación de natación concedió unos campeonatos gallegos, y como Vilagarcía no tenía piscinas, se celebraba la travesía a nado saliendo desde Carril.
Pero mis mejores recuerdos están relacionados con las regatas de dornas, tras las que nos íbamos a comer a una playa de las muchas que hay en la ría.
Todo esto pasó y quiero hacer un recuerdo a mi dorna, "La Parrula", con la que pasé tan buenos momentos.
Fotografía de Carlos Comendador Peña
No hay comentarios:
Publicar un comentario